Gran Canaria es un auténtico paraíso para amantes del mar y para aquellos que participan en cualquiera de las actividades acuáticas y marítimas. La temperatura del agua (18° en invierno y 22° el resto del año), las instalaciones deportivas e infraestructuras de marina recreativa, las condiciones ideales de mar y viento son características favorables para la navegación y para llevar a cabo todo tipo de actividades acuáticas de recreo durante todo el año. De hecho, este sector secundario es el componente más importante de la isla.
Los 236 kilómetros de costa proporcionan a la isla con las mejores condiciones para realizar todo tipo de actividades y deportes naúticos y acuáticos: vientos ideales para la navegación marítima, constantes corrientes marinas que dan lugar a grandes bancos de peces cercanos a la costa, así como la calma del mar son ventajas naturales clave de la isla. Esto implica que mientras en el resto de Europa se tienen que posponer las actividades acuáticas y marítimas durante el invierno, Gran Canaria sigue siendo un refugio para actividades deportivas que se mantiene activo a lo largo de todo el año.
Gran Canaria consta con una variedad innumerable de inmersiones. La isla sorprende a sus visitantes por la riqueza biológica y ecológica que ofrece su entorno marino y, por supuesto, por la variedad y belleza del paisaje, además de, como no, también por su fondo subacuático dado su orígen volcánico.
Las áreas más importantes para la práctica del buceo se encuentran a lo largo de todo el litoral isleño, con diversos sitios de inmersión aún vírgenes. Nuestro centro y escuela de buceo le permiten participar en cursos básicos y avanzados a lo largo de todo el año como también realizar viajes organizados donde, lógicamente, se provee al cliente con todo el equipo necesario. Desde el punto de vista médico, tenga en cuenta que Gran Canaria dispone además de dos cámaras hiperbáricas, las cuales están estratégicamente situadas en el norte y sur de la isla.
(Source: ThisIsTheSource)